Desarrolla tus ideas

No importa si eres el diseñador, el guionista o el creador del vídeo, habrá momentos en los que necesites poner tus ideas en orden. Cuando se te ocurra una buena idea para un vídeo, ten en cuenta estos datos prácticos para empezar el proceso creativo con buen pie, sea cual sea el tamaño del proyecto.
Encuentra consejos para que tus ideas se conviertan en historias y para sentirte a gusto delante de la cámara.
Piensa en tu objetivo
Antes de nada, indica cuál es la misión de tu canal. ¿Por qué te has unido a YouTube y qué esperas conseguir con tu contenido? Los creadores de éxito suelen decir que la clave está en que te apasione lo que hagas.
Además de por qué cuentas la historia, piensa en a quién te diriges:
- Identifica a tu audiencia. Si estás empezando, ten en cuenta a quiénes quieres llegar y sus intereses. Si tu canal lleva un tiempo activo, consulta la pestaña Aumentar tu audiencia de YouTube Analytics.
- Personaliza tu manera de comunicarte. Conviene que los espectadores se identifiquen con tus vídeos. Por ejemplo, la edad, ubicación u otras características de tu audiencia pueden influir en el tono y la voz que utilices.
Los vídeos se crean por todo tipo de razones. ¿Cuál sería tu público objetivo? Esto te ayudará a centrarte en los vídeos que te guste hacer. Independientemente del género o el formato, hay estrategias de contenido fundamentales que pueden contribuir a aumentar tus probabilidades de éxito.
En la práctica
Conoce a tu audienciaEscucha lo que la creadora irlandesa Hazel Hayes tiene que decirte sobre el uso de los datos para entender mejor a la audiencia de un canal.
Crea tu historia
Es el momento de convertir tus ideas en una historia. Cada persona tiene un proceso creativo diferente, pero puedes probar alguno de estos consejos:
- Haz una lluvia de ideas. Deja volar tu imaginación. No te impongas demasiados límites. Puedes escribir tus ideas en una pizarra, sobre todo si grabas los vídeos por grupos.
- Concreta. Si tienes muchas ideas, acota la lista. Señala con un asterisco tus favoritas y decide a cuáles quieres dar vida en tus vídeos.
- Desarrolla. Una vez que hayas elegido una idea concreta, piensa en los elementos clave. Por ejemplo, si es un vlog, plantea bien los componentes de la historia que vas a contar.
Te recomendamos que escribas lo que vas a decir. Los creadores lo hacen de diferentes formas. Puede ser algo tan sencillo como una página de "puntos destacados" para recordar los temas de los que quieres hablar, o bien puedes describir tu historia con más detalle, especificar las escenas que aparecerán y documentar los mensajes principales que quieras transmitir.
Dependiendo del tipo y la complejidad de tu vídeo, incluso puede ser útil tener un guion. Así, no solo los protagonistas tendrán un diálogo específico, sino que puedes aprovechar para incluir en él las directrices para el equipo de producción, si lo hubiera. Si quieres crear un vídeo con guion, puedes encontrar plantillas de ejemplo en la Red.
Lo mejor es escribir con un estilo y voz propios. Todos tenemos nuestra forma de contar historias; intenta reflejar tu personalidad. Si no tienes experiencia en crear guiones, lánzate a la aventura y escribe el tuyo desde una perspectiva única.
Consejos
- Visita posibles localizaciones para tu historia e inspírate con el entorno.
- Recurre a tu comunidad de YouTube para consultarles nuevas ideas.
- Experimenta y elige un formato para tu borrador (o guion) que sea adecuado para ti.
En la práctica
Las historias suelen surgir de las cosas más corrientesA veces, la mejor fuente de inspiración está delante de tus narices (o, en el caso del gato de Simon’s Cat, en la colada).
Practica
Antes de entrar en el estudio de grabación, una banda suele ensayar. Los creadores hacen lo mismo, incluso sin cámara. En un ensayo tenemos la oportunidad de practicar con nuestra historia, de forma que podemos pulir ciertos detalles.
La cantidad de ensayos que necesites dependerá de tu vídeo. Aquí tienes algunas opciones:
- Leer. Si tienes un guion o unos puntos destacados, tanto tú como el resto de personas que tengan líneas de diálogo podéis leer las frases o practicar lo que vais a decir de principio a fin. De esta forma, podrás escucharlas en voz alta, y así sabrás qué debes retocar.
- Revisar. Esto ayuda a concentrarse en los aspectos más técnicos. Por ejemplo, si estás grabando en una localización, puedes practicar en ese entorno para descubrir las dificultades logísticas que puedan surgir y resolverlas.
- Ensayar. Interpreta la historia de principio a fin con los actores y el equipo de producción. Imaginemos que en tu vídeo van a aparecer escenas de riesgo. Si se ensayan, te asegurarás de que todo saldrá bien cuando se grabe.
Es posible que debas ensayar varias veces. Si solo sales tú, bastará con practicar un poco frente al espejo y grabarte con el teléfono, para que te sientas a gusto frente a la cámara. Nadie tiene por qué verlo, pero si quieres recibir opiniones, puedes pedírselas a tu familia o amigos.
Seguimiento
¿Tu proceso creativo es realista?
Echa un vistazo a tus recursos y piensa en cómo puedes optimizar tu presupuesto para la producción. Si has logrado un equilibrio entre los recursos disponibles y los objetivos, ahorrarás tiempo y dinero en tus producciones.
¿Cómo plasmarás tus ideas en historias factibles?
¿Has creado una plantilla para anotar tus ideas y convertirlas en historias? Esta estrategia puede ayudarte a capturar tus mejores ideas y pensar en los recursos y las personas que necesitas para ponerlas en práctica.